No seas tú quien borre su memoria
Marjorie Steinman, Directora Proyecto Abro Memoria, Fundación Memoria Viva / www.abromemoria.cl
Así como existe el acto de hacer memoria, existe a su vez, la posibilidad de mantenerla en la esfera privada, o bien de optar por incluirla en una mayor, es decir, la colectiva. Pero sin duda hay un imperativo de recordar frente a crímenes de la humanidad y experiencias traumáticas. Perdonar sí, pero nunca olvidar.
Hoy se ha inaugurado un nuevo capítulo en la memoria colectiva de la Shoá en Chile: proyecto Abro Memoria. Dicha iniciativa tiene como fin traspasar el ámbito privado de los individuos para generar un legado colectivo de la Shoá.
Abro Memoria es un llamado urgente para que nos hagamos cargo hoy de la memoria colectiva. Memoria Viva y el Archivo Judío de Chile, dos reconocidas instituciones con años de trayectoria, han unido fuerzas para desarrollar el mayor archivo digital de la Shoá en Chile a través de este proyecto.
El destinatario de este llamado es claro: tú, hijo/a de sobreviviente de la Shoá, nieto/a de un refugiado, primo, sobrino o amigo de aquella persona que tuvo que soportar los horrores del nazismo y que logró llegar a Chile, la tierra que los acogió.
Hoy tengo el privilegio de coordinar Abro Memoria y te llamo a ti, que lees esta columna, a participar con una búsqueda activa de material relacionado con los refugiados y sobrevivientes de la Shoá que se albergaron en nuestro país. Busca documentos, fotos, cartas, memorias, entrevistas y registros familiares de los sobrevivientes, de los períodos pre y post guerra, en cualquier formato y condición. Ese material es demasiado valioso para toda la comunidad, como para que sólo quede guardado en tu hogar. Debemos compartirlo, resguardarlo y preservarlo.
Ingresa a www.abromemoria.cl y regístrate en el formulario de contacto. El material recolectado será digitalizado de acuerdo a estándares internacionales por el Archivo Judío de Chile, y pasará a formar parte del archivo de ambas organizaciones. Memoria Viva en sus 10 años de trayectoria, ha logrado entrevistar a más de 140 sobrevivientes de la Shoá en Chile, y hoy busca activar a sus hijos y nietos (llamados 2G y 3G).
La misión de mantener vivo el legado de los refugiados y sobrevivientes, ha puesto a Memoria Viva como un referente en Shoá, y hoy busca complementar y profundizar el gran trabajo de registros audiovisuales que ha logrado construir. A su vez, el Archivo Judío, cuya misión es el resguardo, conservación, organización, y difusión de este gran patrimonio documental, cuenta con más de 70 mil registros institucionales y familiares que dan cuenta de la vida judía en Chile.
Hasta hace un tiempo, los sobrevivientes eran nuestra principal fuente para conocer ese pasado doloroso. Con sus testimonios nos asegurábamos de que no se borrara la mancha oscura, la memoria compleja, con detalles sobre una Europa que ya no es y de sus experiencias para sobrevivir.
Probablemente tú tuviste el privilegio de conocer personalmente a uno de ellos, de escuchar de primera fuente su testimonio, de ver directamente el dolor en sus ojos, pero nuestros nietos no lo tendrán. Hoy el escenario es distinto, quedan muy pocos de ellos. Hoy somos nosotros los encargados de asegurar que su memoria no se pierda en el tiempo.
Cómo explica Gunter Demnig, artista alemán conocido por su proyecto “Stolpersteine” (piedras-obstáculo) como homenaje a las víctimas del nazismo (www.stolpersteine.eu/en/), “Una persona sólo es olvidada cuando su nombre es olvidado”. No seamos testigos de ese olvido. Tenemos el deber de recordar y registrar, para que las generaciones venideras no carezcan de información sobre quienes son. Sólo así sabrán dónde ir.
Abro Memoria nos habla sobre nuestra trascendencia, dejar una huella imborrable, ahí, en la nube, en donde todos puedan verla, conocerla, recordarla y honrarla. Puede ser que nuestros sobrevivientes ya no estén físicamente en este mundo, pero al colaborar tú y yo, su memoria si lo estará.
No seas tu quien borre su memoria.